Tomo I

Inescrutables son los caminos del Señor. Y así, el hombre transita su vida cotidiana reducido al instinto por la angustia económica y social ante los designios misteriosos del sistema empeñado en cortar cualquier indicio que muestre, tan siquiera muestre el intento de Liberar al Hijo de Dios y mucho menos que se reconozca como Hermano de todo lo que le rodea, para alcanzar el Espíritu Fraternal en el respeto de la Igualdad entre los de su especie como de toda la Obra Divina aquí en la Tierra.

Es como un hombre ciego encerrado en un cuarto sin puertas ni ventanas, buscando a su gato negro que, duda si existió alguna vez. Más, se paraliza en la búsqueda. Conculca su Derecho a buscar la Verdad, resignándose al dogma impuesto por las diferentes instituciones religiosas sin saber que forman parte de los círculos concéntricos del Poder Político que esclaviza a la especie humana.

Más, el Signo de los Tiempos se materializa. Ha llegado el momento señalado para el Despertar de la Consciencia, el Despertar del Espíritu de la Duodécima Raza que rescatará la Potestad de la Duda para motivar su curiosidad y buscar las respuestas en los Augustos Misterios en los Sagrados Principios de cada una de las religiones, para descubrir la falsedad en que los hombres se adjudican la posesión de la Verdad por la ambición económica y de poder finito y superficial que alimente su Vanidad.

Los Antiguos Mexicanos anunciaron el retorno de Quetzalcóatl en 500 años y que se inicia el periodo a partir de 1992. Los Católicos esperan el regreso de Jesús a bordo de la Nueva Jerusalén para rescatar al Hijo del Hombre. Los Judíos esperan el Advenimiento del Mesías. La forma puede ser distinta, empero, el fondo es el mismo por lo que se observa la convergencia en los Augustos Principios Divinos y la única diferencia, es el ritual para alcanzarlos.

Así, los masones entregan su trabajo al Gran Arquitecto del Universo, los Testigos de Jehová tocan puertas como parte de su servicio a Dios, los católicos se entregan a Dios y su Hijo Jesús, los Cristianos buscan el sendero de Cristo que señal{o el Camino para encontrar al Padre Creador, los musulmanes rezan disciplinadamente a Alá para congraciarse.

Es, entonces, en el Principio en donde comulgan todos los Hombres de Buenas Costumbres que con dignidad, lealtad y honorabilidad, practican la Religión con base a la tradición heredada o adquirida en su formación profesional. Se aplica el concepto primario de religión como el acto de religar, es decir, reconectar al Hombre con Dios, al Hijo con su Padre.

Un trabajo que hicieron con entrega absoluta al Padre Creador de los Universos los Grandes Iniciados de la Historia, en donde Merlín traspasó los límites de la realidad a la leyenda, seguramente por el interés político del dominio expansionista de la Iglesia Católica que persiguió y exterminó a los que se negaban a renegar Heredad, en pleno ejercicio del mal llamado Santo Oficio como una Religión de Estado en donde, el que no era católico estaba en contra de los católicos.

Se repite la historia. La Bestia de la Globalización se apoya en esa institución religiosa para imponer el Nuevo Orden Imperial. Un tiempo que exige, entonces, rescatar la Enseñanza Iniciática y poder preparar al Hijo del Hombre al Despertar del Espíritu que le permita enfrentar el desafío de la Gran Tribulación en el Tiempo Final.

Lo que aquí se entrega, no es una recopilación de documentos para ilustrar la sapiencia del lector. Es el Conocimiento que dictaron los Grandes Maestros de la Gran Hermandad Universal por medio de la transmisión de pensamiento a los Contactados del presente, para que los Augustos Principios de la Enseñanza Universal se haga vida, es decir, que se practique en el perfeccionamiento y evolución a niveles superiores de Consciencia. El que tenga ojos para ver, vea.

I.-El Mandala de Saturno

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